A LA HOGUERA…
Hoy es noche de hogueras, noche de fiesta para algunos, aquellos que tengan ganas y algo que celebrar, noche de fuego purificador y ruido de cohetes para otros, noche de romper con el pasado y quemar lo sobrante del año anterior debiera de ser para bastantes, pero siempre que hay fuego alguien resulta quemado, y me parece que esta noche de San Juan los quemados vamos a ser nosotros, los ex trabajadores de Pastguren, que para eso estamos en Aranguren y encima lo llevamos hasta en el nombre.
En la anterior entrada hablaba de no quemar las naves, y sigo pensando en no quemarlas, otra cosa es que las naves, que están amontonadas en espera de una solución se prendan solas y ardan espontáneamente o simplemente que se escape una chispita de la hoguera de Aranguren y por proximidad comience un pequeño fuego que acabe consumiendo todas nuestras esperanzas y a nosotros mismos, cosa harto improbable ya que creo que estamos ya demasiado quemados.
Aunque visto desde otro punto de vista quizá no fuera una mala idea aprovechar y hacer una gigantesca hoguera en las instalaciones de Pastguren, donde aparte de quemar nuestra desesperación, pudiéramos quemar al mismo tiempo todo aquello que nos ha conducido a la situación en que nos encontramos en la actualidad. Puestos a enumerar y seguro que me olvido de alguno merecedor, se podría quemar, al Amo, al Sheriff, al Calvo ,a Alambrillas, a mi amigo Monseñor, a muchos o todos los trabajadores, a los Sindicatos, a los Administradores Concursales, al Sr. Juez, a los Arreguis, a todos los buscavidas que se han interesado por nosotros, al Gobierno Vascongado, a los Alcaldes y ex Alcaldes y hasta al mismísimo José Luis Bilbao, bueno a este ultimo me conformaría con marcarle a fuego en la nalga una P muy grande.
Más de uno pensareis que esta P es en recuerdo de Pastguren, pero no, estáis equivocados, la P a la que me refiero es para decirle a él y a todos los demás:
¡PUTAS GRACIAS!